Conmemorar en la impunidad
Autoridades y organizaciones sociales se aprestan a conmemorar el día de la libertad de expresión en México este martes 7 de junio.
El gobierno municipal planea reconocimientos póstumos a Lourdes Maldonado y Margarito Martínez, dos compañeros asesinados en enero pasado aquí en Tijuana.
Un grupo de diversos ciudadanos prepara otro acto en lo que llaman Plaza de la Libertad de Expresión que casi todo el año está entre el abandono y el deterioro en la codiciada zona Río Tijuana
Y el gobierno del estado programó un encuentro con la prensa local en esta frontera con el mismo motivo pero para el día siguiente.
Todo esto mientras los homicidas de nuestros colegas siguen en la impunidad.
Hay seis personas presas y bajo proceso. Tres por el crimen de Lourdes y tres por el crimen de Margarito. Y la Fiscalía asegura que hay más avances.
Pero los que ordenaron los asesinatos, quienes pagaron por ejecutarlos están libres con todo y que hay un fiscal especial para estos casos.
Las autoridades ya tienen claro que el crimen de Martínez Equivel, el fotógrafo de información policiaca fue por su labor profesional.
Poco después de su asesinato ya había indicios de que varios elementos se conjugaron y pusieron en la mira de los criminales “al Mago” como afectuosamente le llamábamos algunos de sus compañeros.
Las autoridades han recabado más información que soporta esta hipótesis.
Pero el plazo que les fijó el juez para concluir la investigación sigue avanzando..
Queda menos tiempo en el proceso contra los tres sujetos encarcelados preventivamente bajo sospecha de ser los autores materiales del asesinato de Lourdes Maldonado.
En el crimen de ‘’Luvy’’ como cariñosamente conocían a la conductora del programa “Brebaje” hay menos claridad sobre el móvil.
La explicación dada por las autoridades federales durante una conferencia matutina del presidente Lopez Obrador de que la mataron porque denunció a vendedores de droga deja muchas dudas especialmente porque las autoridades locales no aportan información que apuntale esos dichos.
La impunidad no es exclusiva en los delitos contra periodistas. La vemos en la mayoría de los 724 asesinatos cometidos en esta ciudad en lo que va del año.
Conmemorar la libertad de prensa cuando los criminales le arrebataron ese y todos los demás derechos a ambos compañeros no tiene mucho sentido, si no hay realmente justicia.
El peligro permanece porque los asesinos intelectuales saben que en Baja California – al menos hasta ahora- no hay castigo por mandar matar a un reportero o a cualquier otra persona.