La última convocatoria de Mariano Soto
Seguidores del difunto Mariano Soto se reunieron el miércoles por la tarde a las afueras del hospital de la Cruz Roja de Tijuana.
Soto se volvió muy popular en las redes sociales gracias a una cuenta de Facebook y una página de internet llamada “Tijuana sin Censura” donde sin mayor recato y con vulgaridades criticaba políticos, se quejaba de las autoridades y denunciaba casos de corrupción.
Lo sentenciaron a prisión por extorsionar a un empresario usando su “Tijuana sin Censura” porque comprobaron que lo obligaba a pagarle mensualmente para no difamarlo nuevamente.
Aún así no parece haber perdido muchos seguidores en redes sociales. Continuó con su lenguaje soez, acusaciones exageradas y frecuentemente infundadas. Pero también injuriaba a policías y a miembros de la delincuencia organizada de manera temeraria. Soto fue asesinado a balazos el domingo de octubre después de que hiciera una transmisión en Facebook donde convocó a la protesta afuera de la Cruz Roja.
Se quejaba de los cobros de la institución donde lo atendieron cuando sobrevivió un primer ataque a tiros en septiembre pasado.
A la manifestación realizada este miércoles asistieron personas que se identifican como activistas o como luchadores sociales por diversas causas.
Algunos dicen ser líderes de autodefensas, otros se han presentado como defensores de derechos humanos y hasta periodistas, algo que también hacía Mariano Soto, aunque alejado de cualquier principio ético.
“Muy imprudente pero a veces no hay otra manera” afirmó un hombre que dijo no pertenecer a ninguna de las organizaciones convocantes pero que reconoce que seguía a Mariano Soto por lo que publicaba.
No quiso identificarse pues dice que le preocupa la inseguridad de la que hablaba el finado y que cuando vio la invitación en redes sociales decidió sumarse.
Desde antes de que empezara la protesta ya se notaba la presencia policiaca.
Ruben Vega quien dice ser ex militar y dirigir “Movimiento 11-11” fue el primero en llegar.
En un mensaje en su cuenta de Facebook convocó a realizar la protesta que había hecho Soto Cortez, antes de que lo asesinaran.
La policía municipal ya lo tenía esposado frente a la Cruz Roja pero cuando un camarógrafo de noticias empezó a grabar le liberaron. Algunos de los testigos que no venían con él dijeron que no había cometido falta alguna.
Él reclamó que lo acusaron de echarle humo en la cara a un oficial.
Poco a poco se fueron reuniendo algunos de los ciudadanos que se han encontrado durante distintas movilizaciones sociales, desde los reclamos por el agua hasta la toma de casetas de cobro en la carreteras de cuota.
El grupo ( unas 20 personas) recordó a Mariano Soto, y exigió justicia por su asesinato.
Trajeron un ataúd vacío usado en otras protestas y ondearon banderas mexicanas mientras reclamaban por los altos cobros de los servicios de la Cruz Roja.
Los policías municipales mantenían la vigilancia a una distancia prudente mientras los manifestantes usaban una bocina para continuar con diversos reclamos contra ellos y otras autoridades.
Algunos agentes de la Fiscalía de justicia llegaron al lugar pero no fue necesaria su intervención.
Cuando las policía municipal intentó retirar con una grúa un auto con placas de California estacionado en una lugar para discapacitados del estacionamiento del Oxxo que está frente al hospital, resultó ser el vehículo en que llegaron Ruben Vega y su compañero.
No tenía tarjetón azul de discapacitado pero si un gafete de prensa colgado del espejo retrovisor. Los participantes en la protesta se quejaron porque estaban por remolcar el auto aparcado en lugar prohibido. La grúa ya tenía enganchado el sedan pero los manifestantes lo rodearon. Tras las protestas la policía retiró la grúa y algunos de los manifestantes se fueron con sus reclamos a la sede del gobierno de la ciudad.
En redes sociales los manifestantes anunciaron para la noche del jueves el velorio de Soto Cortez.
Las autoridades no han dado avances sobre la investigación de este crimen.