EL SOBRE. DEVOLVER AL REMITENTE
Por Vicente Calderón
Tijuana, 22 de noviembre de 2009
El funcionario municipal llamó al jóven reportero. Lo invitó a pasar a su oficina y cerró la puerta.
Empezó la conversación de manera casual y amistosa.
¿Quién cubre la fuente? le preguntó al estudiante de literatura que realiza su servicio social en la agencia de noticias.
El bisoño periodista le respondió que no hay una persona exclusivamente asignada a la fuente municipal.
¿Porqué no nos cubrieron hoy? cuestionó tranquilamente, Miguel Angel Bernal, subdirector de comunicación social del XIX ayuntamiento.
Daniel Ángel Rubio, le dijo que simplemente era porque había surgido otra nota. Un asesinato.
Mientras avanzaba la conversación el funcionario parecía buscar algo en su escritorio. Se inclinó al lado derecho como si estuviera contando algo.
Sacó un sobre color amarillo, en el cual habían escrito Tijuanapress. Lo puso en el escritorio y lo deslizó hacia el reportero.
“Ahí me dejaron esto para la gasolina” le dijo.
El sorprendido comunicador le contestó; “guárdalo para tu, gasolina”, al tiempo que se levantaba del asiento.
Bernal, también se levantó y lo siguió rumbo a la puerta diciéndole que lo podía usar para una comida, mientras intentaba encontrar, donde ponerlo en la camisa del reportero.
“Yo traigo para mi gasolina” insistió con una risa nerviosa, pero sin hacer mayores aspavientos salió de la oficina manteniendo la negativa.
“Ta´bueno” parece que fue lo último que dijo el servidor público.
La práctica famosa entre los jefes de prensa de gobiernos priístas ha revivido en el actual administración de Jorge Ramos.
No es esta una “indignada denuncia”, que pretenda cambiar la situación del periodismo en nuestra ciudad.
En todo el país, los reporteros padecen una combinación de malos salarios, presión de los anunciantes y muchos funcionarios y/o irresponsabilidad de las empresas de medios que retrasan los pagos a su empleados.
Claro, que no se puede ignorar la falta de capacitación de algunos, muchos reporteros y la plaga que significan los que se hacen pasar por profesionales de la comunicación. Estos últimos, no solo aceptan, sino que buscan, activamente y hasta exigen las dádivas o “Chayos”.
No se trata de golpes de pecho. Pero aquí en Tijuanapress.com sabemos que lo que realmente podemos hacer, es ejercer periodismo sin entrarle a viejas prácticas como esta.
Yo lo comenté personalmente con el presidente municipal. No vaya a pensar que lo recibimos. Le dije que nosotros estamos dispuestos a buscar otras formas de ayudar al gremio periodístico, como por ejemplo tomar medidas que verdaderamente acaben con la agresiones de empleados del ayuntamiento contra los verdaderos reporteros.
No es justo que sí siempre nos mantenemos al margen del “sobre” nos incluyan en su lista.
Nunca hemos aceptado -ni vamos a aceptar- algo que comprometa nuestra independencia editorial, porque aunque somos parte de los “nuevos medios,” gracias al internet, estamos tratando de hacer periodismo con los valores tradicionales de esta profesión.
Buscamos patrocinio para nuestros espacios publicitarios y de promoción. Los medios más prestigiados han vivido por muchos años de esta forma.
Ese espacio sí está a la venta. El editorial no.
Es cierto que los panistas, no erradicaron el “embute” o “chayo”, o “sobre” como se dice en México.
Lo han disminuido y en otros casos simplemente lo disfrazan de publicidad si conviene a sus intereses. En todos los niveles.
Reconocemos que en varias ocasiones, este y los anteriores ayuntamientos nos han comprado publicidad, sin tratar de interferir en nuestro trabajo. Tienen todo el derecho de promover su imagen, pero en honor a la verdad, nunca hemos sido presionados para orientar nuestra cobertura.
Son tiempos difíciles, muy difíciles económicamente. Por eso, a mi juicio es aún más importante reconocer la actitud de nuestro compañero Daniel Ángel Rubio.
Bien podía haberse quedado callado. El problema no es solo del gremio periodístico sino de nuestra sociedad en general.
Si el la prensa le decimos “chayo” en la sociedad en general se le dice “mordida”
Por eso, cuando la gente no le entra … eso sí es noticia y vale la pena comentarlo.